El frigorífico de Tarariras no es ajeno a la situación que vive el Departamento de Colonia y tras llegar a más de 200 empleados infectados por la COVID-19 la empresa ha decidido detener la producción hasta el 1 de febrero.
“Se decidió hacer una ventana sanitaria por el bien de los trabajadores” declaró el presidente de ALPEC, Mariano Ebert, en diálogo con RO Contenidos. El 31 de enero se evaluará nuevamente la situación y en caso de esta mejorar el 1ro de febrero comenzará la faena y el 3 el desosado.
