Bien sabemos que, en esta época entre despedidas, cierres de año y festejos de fin de año muchas veces se ve desorganizada nuestra alimentación o incluimos ciertos alimentos y bebidas en mayor frecuencia de lo que habitualmente lo hacemos, como pueden ser en el caso de los postres, refrescos, alcohol, etc, entonces se plantea la duda ¿qué hacer para poder manejar todo esto de forma equilibrada?
Lo primero a tener en cuenta es que los alimentos no solo cumplen un rol nutritivo en nuestras vidas, también tienen un importante rol social y emocional, entonces quedar por fuera de los festejos no es una opción ni debería serlo.
👉🏼Aquí compartimos 3 consejos para poder disfrutar de las diferentes comidas “extras” que hagamos y a su vez mitigar el posible malestar físico que podrían generar:
1) Siempre conviene realizar todos los tiempos de comidas previos a esa comida extra, sin saltearse alguno por pensar que de esta manera “mitigaré el daño” (por ejemplo: no es recomendable ir a una cena de festejo sin haber merendado). Entonces cuando llegue el momento de comer esos alimentos más intensos de esa cena puntual tendré el apetito normal y evitaremos hacer grandes excesos.
2) Mantener antes, durante y posterior a esa comida más intensa, una muy buena hidratación con agua y eventualmente tomar algún refresco si se quisiera, pero no dejar de lado el agua.
3) Realizar los reposos digestivos que sean necesarios, escuchando al propio organismo. Por ejemplo, si en la mañana siguiente a una cena intensa y tardía no se siente suficiente apetito como para desayunar, entonces convendrá retrasar el desayuno y acompañar el proceso natural de digestión y depuración con suficiente agua y podemos romper ese ayuno por ejemplo con algo liviano como ser: una fruta.
🙌🏽Ante todo siempre pensar en el equilibrio, donde el disfrute y el bienestar digestivo puedan convivir para que el beneficio sea mayor.
Por Lic. Leticia Romero
Nutrición y Salud Integrativa