Se trata de un nuevo símbolo que representa el trabajo en equipo y el orgullo local.
La obra estuvo a cargo del artista Ricardo Rivas, quien trabajó junto a las alumnas del curso de mosaiquismo de la Escuela del Hogar.
Este proyecto, apoyado por el municipio local, incluyó la creación de mosaicos que adornan el reloj, reflejando el espíritu de unidad y esfuerzo colectivo que caracteriza a la comunidad.