Editorial 3 de enero
3 enero, 2020
Comenzamos el año.-
Con el pensamiento puesto aún en cómo vivimos su fin y principio, estamos iniciando esta nueva década, y en el despertar de a poco en este Enero, aún nos falta celebrar con los más chicos, la festividad de Reyes.- Tal vez la única fiesta de fines de año, que no ha perdido su nombre religioso.-
La celebración de navidad ha ido diversificando su identidad inicial, con las apariciones de personajes como papa noel, santa Claus.- En cambio los Reyes siguen siendo ellos, Melchor, Gaspar y Baltasar.- Con ellos volvemos a la recordación de la celebración religiosa y de las escrituras, que dicen que, traían regalos al niño Dios recién nacido en Belén.-
La tradición se mantiene y la ilusión de los más chicos se renueva año a año hasta llegar a un estado emocional tan especial, que les lleva a dejar agua y pasto para los camellos junto al arbolito o al pesebre familiar.-
Es bueno que se pueda mantener esta tradición en cada casa y se han hecho clásico también los desfiles de Reyes, por las calles, en distintas ciudades, que terminan con regalos para cientos de niños en cada punto, sumando miles en la región.- En general de bajos recursos y porque no, también otros chicos que no conocen de la división social de lo económico, pero si mantienen intacta su ilusión infantil.-
Capítulo aparte merecen los organizadores de estas jornadas.- A lo largo del año la organización de fiestas y beneficios para recaudar fondos.- Con posterioridad la adquisición de juguetes y por último la llegada del día feliz, en que los destinatarios de ese esfuerzo, miren con ojos de asombro a los Reyes que le están entregando sus preciados regalos.-
Nos ponemos en las personas que toman la personalidad de los Reyes, cuando estrechan las manos de los chicos o reciben o dan ese beso cariñoso que dice gracias.- Sin duda debe ser como habitualmente se dice un mimo al alma, y también sentirse útil a la sociedad.-
Bienvenido el aprovechar estas místicas fechas, para desarrollar el sentimiento personal del ser humano de colaborar, de dar sin esperar más que el agradecimiento.- Si podemos dar en cada día un momento más para colaborar con el prójimo, seguramente nos sentiremos mejores personas.-
Las organizaciones sociales de distinta índole existen en cada ciudad, y siempre faltan manos para dar, pensemos en acercarnos a ellas.- En esta fiesta d Reyes, estas instituciones, demuestran lo que se puede hacer, con el pensamiento puesto en ayudar y uniendo las manos en la tarea.-
Esta es la opinión de Radio del Oeste